CINEINFINITO / Cine Club Filmoteca de Cantabria
Viernes 27 de Julio de 2018, 17:00h, Filmoteca de Canatabria
Calle Bonifaz, 6
39003 Santander
Programa:
Senseless (1962)16mm, b/w, sound, 28 min
Chumlum (1964) 16mm, color, sound, 26 min
Formato de proyección: HD (Nuevos transfers digitales)
(Agradecimiento especial a Filmmaker’s Coop NY)
Ron Rice nació en Nueva York en 1935. Rice fue un vagabundo que abandonó la Universidad, siempre inquieto por naturaleza. A causa de esta inquietud se inició en el cine. Rice empezó comprando una cámara de 8 mm para grabar carreras ciclistas en San Francisco. Fue en esta ciudad donde conoció a Taylor Mead, quien le produjo su primera película, “The Flower Thief” (Arthouse Inc.). The Flower Thief fue terminada en 1960 con la ayuda de Taylor Mead, el poco convencional héroe de los Beats de San Francisco y Nueva York (Sitney, 300). Después del éxito de The Flower Thief, Rice jugó con la idea de hacer algunas otras películas justo después. Empezó una película llamada The Dancing Master (El maestro de baile) y otra película sin título con su amigo Jerry Jofen, pero perdió interés en ellas durante su producción (Sitney, 301). Rice hizo Senseless, que se estrenó más tarde en el mismo año 1962. Senseless salió de una película que él planeaba hacer en la isla de Eric Nord. Rice conocía a Nord desde The Flower Thief, y sabía que Nord había comprado una isla al Gobierno mexicano con la intención de hacer de ella la isla de Utopía. Lamentablemente, Nord olvidó averiguar si había agua en la isla, de modo que cuando Rice llegó para rodar su película, Nord y su equipo habían descubierto su error, y ya se habían largado (Sitney, 301). Lo único que a Ron Rice le quedó de esa expedición fue algo de metraje que rodó en su camino a la isla para encontrarse con Nord (Sitney, 301).
Cuando Rice regresó a Nueva York, juntó su investigación y los diversos episodios que había registrado, y diseñó un popurrí con lo que había rodado en México y otro material de archivo y se dio cuenta de que la película no tendría argumento ni continuidad sintética. Pese a la increíble ironía, Senseless fue acabada en 1962. Rice agradeció a Jonas Mekas por la creación de Senseless, a la que se considera, irónicamente, como la más cuidadosamente organizada de sus películas (Sitney, 301).
Después de terminar Senseless, juntó a Taylor Mead y Winifred Bryan para hacer una nueva película llamada The Queen of Sheba Meets the Atom Man (La reina de SAba encuentra al hombre átomo) (Sitney, 302). Rice hizo algún primer corte de la idea para reunir dinero para la película. Las dos escena que se hicieron fueron rodadas sobre la hamletiana Twice a Man (Dos veces hombre) de Greg Markopoulos. Rice consiguió la financiación que buscaba, y los insertos temporales y la combinación de personajes procedentes de The Queen of Sheba Meets the Atom Man fueron un paso más hacia el proceso de síntesis de la película mítica. Rice nunca terminó aquella película. Mead la terminó en 1982 (Sitney, 302).
Rice continuó con otro proyecto llamado Chumlum. Chumlum se desarrolló a partir de la inspiración que encontró Rice en las ocasiones en que ayudó a Jack Smith. Una producción que Rice sentiría como una fuente de inspiración concreta fue la película de Smith Normal Love. Mientras estaban rodando las películas, Rice volvía al apartamento de Smith con el equipo técnico y artístico, y observaba lo que hacía todo el mundo. Luego utilizó estas ideas para crear Chumlum mediante la fragmentación de acontecimientos y el uso de la superposición. La película fue acabada en 1964. Tristemente, al final de aquel año murió de una neumonía cuando estaba en México. El curriculum de Rice incluye seis películas y revela una gran mente cinematográfica. Fue un verdadero artista de genio que murió demasiado joven.
–Cary Collins, 2003
[Ron Rice was born in New York, NY in 1935. Rice was a drifter who dropped out of high school and by nature was very restless. This restlessness is how he initially made his way into film. Rice got his start by buying an 8mm Camera to record bicycle races in San Francisco. It was in San Francisco that he met Taylor Mead, which in turn led him to the production of his first film The Flower Thief (Arthouse Inc). The Flower Thief was finished in 1960 with the help of Taylor mead the offbeat hero the San Francisco and New York Beats (Sitney, 300). After the Success of The Flower Thief, Rice toyed with the idea of making some films right after the Flower Thief. Rice Started a film called The Dancing Master and another untitled film with his friend Jerry Jofen, but lost interest in the films during their production (Sitney, 301). Rice made Senseless and that came out later that same year of 1962. Senseless came out of a film that he planned to make at Eric Nord’s island. Rice knew Nord from The Flower Thief and He knew that Nord purchased an island from the Mexican government with the intent of making that island a Utopia. Unfortunately Nord forgot to find out if there was water on the island so when Rice arrived on the island to shoot his film, Nord and his crew realized the mistake they had made and had already cleared off the island (Sitney, 301). The only thing Ron Rice had left from his trip was some footage that he took on his way to the island to meet Nord (Sitney, 301).
When Rice got back from the trip and arrived in NewYork, he pooled together his research and the various episodes he had recorded. He divised a potpourri from what he recorded in Mexico and what he had on file and realized that the film would have no plot nor a continuity of a single mediator. Despite the incredible irony, the creation Senseless was completed in 1962. Rice gave credit to Jonas Mekas for the creation of Senseless, but ironically Senseless is thought of as Rice’s most carefully organized formal film (Sitney, 301).
After Rice finished Senseless he bought together Taylor Mead and Winifred Bryan, to make a new film called The Queen of Sheba Meets the Atom Man (Sitney, 302). Rice made rough-cuts of the idea to try to raise money for the film. The two scenes that were made were on Hamletand Greg Markopoulos’ Twice a Man. Rice got the funding that he was looking for and the intercutting and combination of characters brought by the Queen of Sheba Meets the Atom Man was a step closer to the synthetic process of the mythic film. Rice never finished the film; Mead finished it in 1982 (Sitney, 302).
Rice went on to another project called Chumlum. Chumlum was developed from the inspiration that Rice found on the occasions when he would assist Jack Smith with his productions. One production that specifically aided the inspiration that Rice would feel was Smith’s film Normal Love. While they were filming each production Rice would go back to Smith’s apartment, with the cast and crew and observe what everyone would do. He used these ideas to create Chumlum with the fragmenting of events and use of superimposition. The film was completed in 1964. Sadly at the end of that year he died of pneumonia while he was in Mexico. Rice’s resume comes to six films and shows a great mind for film. He was truly an artistic genius who died too young.
–Cary Collins, 2003]
(Gregory Markopoulos, P. Adams Sitney, Andy Warhol, Ron Rice, Jonas Mekas. Film-Makers’ Co-op, 1964)
LA MUERTE DE RON RICE
por Jonas Mekas
La noticia de la muerte de Ron Rice fue demasiado inesperada, demasiado repentina, demasiado chocante. ¿De qué ha muerto? De pulmonía, en Acapulco, Méjico. Fue enterrado allí el día de Navidad. Fue algo -y aún nos lo parece- tan inútil, tan en vano. Algo increíble, y como al principio nos pareció uno de los típicos chistes de Ron (o al menos eso esperábamos), muchos de nosotros no lo creímos y continuamos llamando por teléfono a la Co-op para ver si no había noticias de lo contrario. Pero no las había.
Hace sólo unas pocas semanas, en esta misma columna, culpé a la ciudad de New York por el hambre y la miseria de Ron. Fue la ciudad de New York la que lo empujó esta primavera a Méjico, hambriento y desesperado: la policía, el acoso a los artistas. “No puedo trabajar aquí – dijo-. Tengo que irme.”
Ahora, Ron ha perdonado a todos y no culpa ya a nadie. ¿Dónde está? Puede reírse de New York con su habitual sonrisa. Pero yo sigo manteniendo que New York es responsable de esta muerte inútil de uno de nuestros mejores artistas. “No debemos nuca circunscribirnos a estas estúpidas limitaciones que amenazan terminar con el arte -la censura es una cosa estrecha-, la lucha del hombre por su auto-expresión es una cosa eterna, nacida en el cielo, libre”, escribió desde Acapulco.
La pequeña obra que ha dejado Ron tendrá que ser comparada ahora a la obra que dejó Jean Vigo en el momento de su repentina muerte. The Flower Thief, Senseless, Chumlum, The Queen of Sheba Meets the Atom Man y el trabajo sin terminar que deja en Méjico constituyen la totalidad de la obra de Ron. Cada uno de los films es un nuevo punto de partida, ninguno es como otro; cada uno respira la poesía, la imaginación y el sentido de lo inesperado que lo señalaron como uno de nuestros artistas más originales, pero será una obra que ahora permanecerá incompleta, como una pasión truncada, como una realización interrumpida.
No es éste el momento para una evaluación detallada del trabajo de Ron, ni tampoco es el momento de culpar a nadie. Todo es aún demasiado increíble. La muerte de Ron hará que muchos de nosotros pensemos en nuestro propio destino, nuestra propia vida y nuestro propio trabajo; un artista de la talla de Ron, de su temperamento y su belleza, no puede desaparecer de esa manera sin afectar profundamente al resto de su generación. Las proféticas líneas de Ginsberg -“He visto a las mejores mentes de mi generación destruidas por la locura, muriéndose de hambre, histéricas, desnudas”-siguen siendo las más realísticas de nuestra generación.
Hace sólo tres semanas, Ron escribió en una carta:
“EI otro día filmamos dos rollos de película; desde entonces he estado sin film. Pero no sin ideas. Entretanto papaíto-nadie soñaba con los proyectos de un fantástico nuevo film. Si sólo tuviera el material para seguir adelante a toda marcha…”
Sí, Ron, ahora todo el film es tuyo, todo el Ektachrome del mundo es tuyo, y las más bellas fantasías, los más bellos colores y espacios son tuyos -ahora tus sueños pueden realizarse-, aunque nunca veremos lo mejor de tu trabajo, sólo algunos de nosotros, quizá, lo soñaremos…
P.D.-Ron ha dejado a Amy, su mujer, que espera un hijo para la semana próxima. Amy piensa quedarse en Acapulco hasta que nazca el niño. Se le puede escribir a General Delivery, Acapulco, Gro.
[THE DEATH OF RON RICE
por Jonas Mekas
It was too shocking, too sudden, too unexpected, the news that Ron Rice is dead. From what? From pneumonia, in Mexico, in Acapulco. He was buried there, on Christmas Day. It seemed—and it still seems to us—so useless, so wasteful. It was unbelievable, and sounded so much (we hoped) like one of Ron’s jokes that some of us didn’t believe it to the last minute and kept calling the Co-op, if there was no other, contrary news. But there was no other news.
Only a few weeks ago, in this same column, I put the blame for Ron’s hunger and misery on New York City. It was New York City that drove him out this spring, hungry and desperate, to Mexico—the police, the harassment of the artists. I can’t work here,” he said. “I have to go.”
By now Ron has forgiven everybody and doesn’t blame anyone; where he is now? He can laugh at New York City, with his usual smile. But I still blame New York for this wasteful death of one of our most beautiful artists “We west news subscribe to these stupid limitations which threaten to close up the arts—censorship is a narrow thing—man’s struggle for self-expression is an eternal thing—both in the sky, free,” he wrote from Acapulco.
The body of work that Ron left will have to be compared now with the work that Jean Vigo left at his own untimely and wasteful death. The Flower Thief, Senseless, Chumlum, The Queen of Sheba Meets the Atom Man, and the .finished Mexican footage that is the totality of Ron’s work. Each film is a new departure, each like no other, each breathing the poetry, un-expectedness, and imagination that marked him s one of our most original artists—but a body of work which will remain, now, an incomplete, broken-off passion, a broken-off achievement—
This is no time for detailed evaluation of Ron’s work, neither is it a time for blaming. It is still too unbelievable. Ron’s death will make many of us think about our own fates, our own work, our own lives—no artist of floss’s stature, temperament, and beauty can be broken like thatwithout affecting deeply the rest of his generation. Ginsberg’s prophetic fines—saw the best minds of my generation destroyed by madness, starving hysterical —remain the most realistic lines of our generation.
Only three weeks ago Ron wrote M a letter: “We shot a couple of rolls one day some time ago, since then I’ve been without film. But not without ideas. In the between time nobody-daddy dreamed in my head the blueprints for a most fantastic new film. If I only had the materials to go full speed…”
Yes, Ron, all the film is yours now, all the Ekthachrome of the world is yours, and the most beautiful colors and spaces and fantasies are yours— now your dreams are coming through although the best of your work we’ll never see—only some of us perhaps, will dream it—
P. S. Ron left Amy, his wife, with a child coming next week. She plans to stay in Acapulco until the childbirth. She can be reached care of General Delivery, Acapulco, Gro.]
Senseless (1962)
“Senseless consiste en un flujo poético de imágenes afiladas como una navaja, cuyo contenido explícito retrata a unos viajeros extáticos que se dejan llevar por las fantasías y placeres de un viaje a México… un montaje muy efectivo entrelaza sutilmente el desarrollo contrapuntístico de los motivos del amor y el odio, la paz y la violencia, la belleza y la destrucción.” –David Brooks
[‘Consisting of a poetic stream of razor sharp images, the overt content of Senseless portrays ecstatic travellers going to pot over the fantasies and pleasures of a trip to Mexico…highly effective cutting subtly interweaves the contrapuntal development of themes of love and hate, peace and violence, beauty and destruction.’ – David Brooks]
***
La copia de Senseless, de 28 minutos de duración, era muda, pero se proyectó en el Charles Theater de Nueva York con música de Bela Bartok. Esto no fue algo planeado: simplemente, era uno de los pocos discos LP que había en la cabina de proyección. Cada proyección fue un poco diferente, ya que el disco nunca se sincronizaba con el principio de la película en el mismo punto. Cary Collins proporcionó información sobre la producción:
Senseless salió de una película que él planeaba hacer en la isla de Eric Nord. Rice conocía a Nord desde The Flower Thief, y sabía que Nord había comprado una isla al Gobierno mexicano con la intención de hacer de ella la isla de Utopía. Lamentablemente, Nord olvidó averiguar si había agua en la isla, de modo que cuando Rice llegó para rodar su película, Nord y su equipo habían descubierto su error, y ya se habían largado. Lo único que a Ron Rice le quedó de esa expedición fue algo de metraje que rodó en su camino a la isla para encontrarse con Nord. Cuando Rice regresó a Nueva York, juntó su investigación y los diversos episodios que había registrado, y diseñó un popurrí con lo que había rodado en México y otro material de archivo y se dio cuenta de que la película no tendría argumento ni continuidad sintética. Pese a la increíble ironía, Senseless fue acabada en 1962. Rice agradeció a Jonas Mekas por la creación de Senseless, a la que se considera, irónicamente, como la más cuidadosamente organizada de sus películas.
[The 28-minute Senseless print was silent, but it played at New York’s Charles Theater with Béla Bartók music. This was not planned; it just happened to be one of the few LP records in the projection booth. Each showing was slightly different since the record was never synched with the start of the film at the same place. Cary Collins provided background on the production:
Senseless came out of a film that he planned to make at Eric Nord’s island. Rice knew Nord from The Flower Thief, and he knew that Nord purchased an island from the Mexican government with the intent of making that island a Utopia. Unfortunately, Nord forgot to find out if there was water on the island, so when Rice arrived on the island to shoot his film, Nord and his crew realized the mistake they had made and had already cleared off the island. The only thing Ron Rice had left from his trip was some footage that he took on his way to the island to meet Nord. When Rice got back from the trip and arrived in NewYork, he pooled together his research and the various episodes he had recorded. He devised a potpourri from what he recorded in Mexico and what he had on file and realized that the film would have no plot nor a continuity of a single mediator. Despite the incredible irony, the creation Senseless was completed in 1962. Rice gave credit to Jonas Mekas for the creation of Senseless, but ironically, Senseless is thought of as Rice’s most carefully organized formal film.]
Chumlum (1964)
Con Jack Smith, Beverly Grant, Mario Montez, Joel Markman, Frances Francine, Guy Henson, Barry Titus, Zelda Nelson, Gerard Malanga. Música de Angus McLise. Técnico de sonido: Tony Conrad. “No difiere mucho de un sueño extravagante, con colores desenfrenados…” –New York Herald Tribune
[Jack Smith, Beverly Grant, Mario Montez, Joel Markman, Frances Francine, Guy Henson, Barry Titus, Zelda Nelson, Gerard Malanga. Music by Angus McLise. Sound Technician: Tony Conrad. “It’s not unlike a bizarre dream, in riotous color..” –New York Herald Tribune]
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«La película de Ron RICE, CHUMLUM, se ha realizado en Nueva York con la participación de los actores de la película de Jack Smith, Normal Love, que llevaban trajes, fumaban hierba, meditaban, se balanceaban sobre hamacas y se movían con gracia siguiendo el sonido penetrante del “chumlum”, un instrumento de cuerdas. La delicadeza y transparencia de los colores y las texturas tienen una densidad próxima a la de los sueños, gracias a las sobreimpresiones. Estas, asociadas a los zumbidos hipnóticos del “chumlum”, a los balanceos de las hamacas, a los ornamentos orientales, igual que la confusión entre lo exterior y lo interior, la danza cósmica de los personajes disfrazados, el humo que se arremolina, hacen desplegarse otro tiempo y otro espacio, una expansión de la conciencia del cuerpo. Según P. Adams Sitney, “la película se convierte en una ensoñación (la del fumador de hachís, Smith) en la que el tiempo se estira o se pliega sobre sí mismo”. La película parece crear un espacio cósmico que combate la afasia de la vida moderna.» –Sally Banes
[«Le film de Ron RICE, CHUMLUM, a été réalisé à New York avec la participation des acteurs du film de Jack SMITH, Normal Love, qui étaient en costume, fumaient de l’herbe, méditaient, se balançaient sur des hamacs et se déplaçaient gracieusement au son lancinant du «chumlum», un instrument à cordes. La délicatesse et la transparence des couleurs et des textures ont une densité proche de celle du rêve, grâce aux surimpressions. Celles-ci, associées aux vrombissements hypnotiques du «chumlum», aux balancements des hamacs, aux ornements orientaux, de même que la confusion entre l’extérieur et l’intérieur, la danse cosmique des personnages costumés, la fumée tourbillonnante, font se qu’un autre temps et un autre espace se déploient, une expansion de la conscience du corps. Selon P. Adams Sitney, «le film devient une rêverie (celle du fumeur de haschich, Smith) dans laquelle le temps s’étire ou se rabat sur lui-même». Le film semble créer un espace cosmique qui combat l’aphasie de la vie moderne.» –Sally Banes]
(Traducción de los textos: Javier Oliva)