Cineinfinito #265: Robert & Monica Flaherty

CINEINFINITO / Centro Cultural Doctor Madrazo
Jueves 15 de Diciembre de 2022, 18:30h. Centro Cultural Doctor Madrazo
Calle Casimiro Sainz, s/n
39004 Santander

Programa:

– Moana (1926-1980), 16mm, b&n, sonora, 97min

Formato de proyección: HD (copia restaurada)


Robert Joseph Flaherty (16 de febrero de 1884 – 23 de julio de 1951) fue un cineasta estadounidense que dirigió y produjo el primer largometraje documental que tuvo éxito comercial, Nanook of the North (1922). La película labró su reputación y ninguna obra posterior suya llegó a igualar su éxito, aunque continuó desarrollando el nuevo género de documental narrativo con Moana (1926), ambientada en los mares del Sur, y Man of Aran (1934), filmada en las islas de Aran, en Irlanda. Flaherty está considerado como el «padre» tanto del documental como del cine etnográfico.

Flaherty estuvo casada con la escritora Frances H. Flaherty desde 1914 hasta su muerte en 1951. Frances trabajó en varias de las películas de su marido y recibió una nominación al Oscar al Mejor Guion Original por Louisiana Story (1948).

Robert Joseph Flaherty, (February 16, 1884 – July 23, 1951) was an American filmmaker who directed and produced the first commercially successful feature-length documentary film, Nanook of the North (1922). The film made his reputation and nothing in his later life fully equaled its success, although he continued the development of this new genre of narrative documentary with Moana (1926), set in the South Seas, and Man of Aran (1934), filmed in Ireland’s Aran Islands. Flaherty is considered the «father» of both the documentary and the ethnographic film.

Flaherty was married to writer Frances H. Flaherty from 1914 until his death in 1951. Frances worked on several of her husband’s films, and received an Academy Award nomination for Best Original Story for Louisiana Story (1948).

Frances Flaherty, Richard Leacock y Robert Flaherty en “Louisiana Story”.

Monica Flaherty Frassetto (1920-2008) fue cineasta y arqueóloga.

Nacida en Norwalk (Connecticut), Frassetto era hija de los cineastas Robert J. Flaherty y Frances Hubbard Flaherty. En su tercer cumpleaños, los padres de Frassetto llevaron a su hija a la isla de Samoa, en el Pacífico, donde empezaban a trabajar en Moana, su película documental de 1926.

Frassetto asistió a la escuela en Heidelberg y Devonshire (Inglaterra). Mientras estuvo en Europa, trabajó como aprendiz con el diseñador escénico alemán Hein Hechroth y el pintor suizo Kurt Seligmann.

En 1940, Frassetto se formó como piloto de aviación en los Estados Unidos. De 1942 a 1944 permaneció en Alamogordo (Nuevo México), donde pilotó ferris y aviones al servicio de la Women Airforce Service.

Después de la guerra, Frassetto trabajó para la revista Fortune y para la Betty Parsons Art Gallery en Nueva York entre 1948 y 1952. Se casó con Roy Lockwood, un director de cine y radio británico, en 1947. Se divorciaron en 1951.

Frassetto vivió en las Islas Vírgenes de EE. UU. de 1951 a 1956, donde organizó programas de investigación arqueológica (así como en Puerto Rico). En esta isla conoció a Roberto Frassetto, un arqueólogo italiano con el que se casó. Trabajaron juntos y vivieron en La Spieza (Italia), entre 1960 y 1966. Frassetto regresó a Puerto Rico, y vivió allí hasta 1970, cuando se mudó a la granja Flaherty en Dummerston (Vermont), para cuidar a su madre. Vivió en Vermont durante 38 años, y allí dirigió el centro de estudios cinematográficos Flaherty, fundado por su madre.

Después de regresar a Vermont, Frassetto donó su casa en Puerto Rico a la Conservation Society of Puerto Rico.

Monica Flaherty Frassetto (1920–2008) was a filmmaker and archaeologist.

Born in Norwalk, Connecticut, Frassetto was the daughter of pioneering filmmakers Robert J. Flaherty and Frances Hubbard Flaherty. On her third birthday, Frassetto’s parents brought their daughter to the Pacific island of Samoa where they began working on Moana, their 1926 documentary film.

Frassetto attended school in Heidelberg, Germany, and Devonshire, England. While in Europe she apprenticed with German scenic designer Hein Hechroth and Swiss painter Kurt Seligmann.

In 1940, Frassetto took flying lessons in the United States. From 1942–44, she was stationed in Alamogordo, New Mexico, where she was a ferry pilot and Women Airforce Service Pilot.

After the war, Frassetto took a job as a researcher at Fortune and worked for the Betty Parsons Art Gallery in New York from 1948–1952. She married Roy Lockwood, a British film and radio director, in 1947. They divorced in 1951.

Frassetto lived in the US Virgin Islands from 1951–56, where she organized archaeological research programs there and in Puerto Rico. In Puerto Rico, she met and married Roberto Frassetto, an Italian archaeologist. They worked together and lived in La Spieza, Italy, between 1960 and 1966. Frassetto then returned to Puerto Rico, where she lived until 1970, when she moved back to the Flaherty farm in Dummerston, Vermont, to look after her mother. She lived in Vermont for 38 years, where she continued to run the Flaherty film study center, started by her mother.

After she returned to Vermont, Frassetto donated her home in Puerto Rico to the Conservation Society of Puerto Rico.

Monica Flaherty and Moana (Ta´avale), 1926.

Moana (1926-1980)

Moana es una película documental muda estadounidense de 1926, o más estrictamente una obra de “docu-ficción”, que fue dirigida por Robert J. Flaherty, autor de Nanook of the North (1922).

Moana se filmó en Samoa, en las aldeas del distrito de Safune en la isla de Savai’i. El nombre del personaje masculino principal, Moana, significa “mar profundo, aguas profundas” en el idioma samoano. Al hacer la película, Flaherty vivió en Samoa con su esposa y colaboradora Frances H. Flaherty y sus tres hijas durante más de un año. Llegaron a Samoa en abril de 1923 y se quedaron hasta diciembre de 1924, y la película se completó en diciembre de 1925.

Con la esperanza de que Flaherty pudiera repetir el éxito de Nanook, Paramount Pictures lo envió a Samoa para registrar en una película la vida tradicional de los polinesios. Según los informes, Flaherty llegó con 16 toneladas de equipo de rodaje. Esto incluía una cámara de cine normal y una cámara en color Prizma, ya que Flaherty esperaba filmar algunas imágenes en ese proceso, pero la cámara no funcionó correctamente.

Se considera que Moana es el primer largometraje realizado con película pancromática en blanco y negro en lugar de la película ortocromática que se usaba comúnmente en ese momento para los largometrajes de Hollywood. Flaherty iba revelando su película sobre la marcha, en una cueva en Savai’i. Tuvo que someterse a tratamiento por envenenamiento accidental, después de beber agua de la cueva, que contenía nitrato de plata procedente de la película. El nitrato de plata también produjo manchas en el negativo.

Al igual que en la anterior Nanook (y su película posterior, Man of Aran), Flaherty no se limitó a registrar la vida de la gente de Samoa, tal como era. Siguió su procedimiento habitual de “elegir” para “papeles” a personas locales a las que consideraba actores potencialmente fotogénicos, y estableció entre ellos relaciones familiares ficticias.

También, como en las otras películas, realizó escenas en las que se recreaban prácticas exóticas antiguas como si todavía estuvieran vigentes. En Nanook y Man of Aran incluyó secuencias de caza anacrónicas. En Moana, en un tiempo en que los samoanos vestían ropa moderna de estilo occidental bajo la influencia de los misioneros cristianos, Flaherty persuadió a sus intérpretes para que se pusieran trajes tradicionales de tapa (hechos con la corteza de la morera, en un proceso que se muestra con detalle en la película); las «doncellas» iban en topless.

También organizó un ritual de paso a la edad adulta en el que el joven protagonista masculino se sometió a un doloroso tatuaje tradicional, por el cual hubo que compensarle económicamente. Estas estrategias han hecho que las películas de Flaherty se clasifiquen a veces como «docu-ficción».

No obstante, vivir de la tierra y el océano era relativamente fácil en Samoa, lo que dejaba escaso margen para que Flaherty pudiera recurrir a su tema favorito de «El hombre contra la naturaleza», como había hecho en Nanook y volvería a hacer en Man of Aran. Por lo tanto, aunque la película fue visualmente magnífica y recibió elogios de la crítica en su momento, carecía de la crudeza dramática de Nanook, lo que puede haber contribuido a su fracaso de taquilla. (Bruce Posner, el restaurador de la película, comentó: «Dios sabe lo que esperaba la Paramount. Simplemente se estrenó mal. Intentaron convertirla en una historia de amor de los mares del Sur, cosa que es, pero no en un sentido convencional.»)

La palabra documental se aplicó por primera vez en un contexto cinematográfico en una reseña de esta película escrita por «The Moviegoer», seudónimo de John Grierson, en el New York Sun el 8 de febrero de 1926.

Restauración

El más pequeño de los hijos que Robert y Frances Flaherty llevaron a Samoa fue su hija Monica, que entonces tenía tres años. En 1975, Monica Flaherty regresó a Savai’i para crear una banda sonora para la, hasta entonces, película muda de sus padres, incluyendo la grabación de sonidos ambientales de la vida rural, diálogos doblados en samoano y canto tradicional. La «Moana con sonido» resultante se completó en 1980, con la ayuda de los cineastas Jean Renoir y Richard Leacock, y se estrenó públicamente en París en 1981. En esa etapa, sin embargo, dado que el negativo original ya no existía, la calidad visual de la copia de 16 mm de Monica Flaherty (una copia de una copia de la película original de 35 mm de nitrato de su padre) dejaba mucho que desear y sufriría una mayor degradación con el tiempo. Sin embargo, más recientemente, el conservador Bruce Posner y el cineasta finlandés Sami van Ingen, bisnieto de los Flaherty, recurrieron a las mejores copias conservadas de la película en 35 mm para preparar, con la ayuda del restaurador Thomas Bakels, una copia restaurada digitalmente, que fue sincronizada con la banda sonora de Monica Flaherty por el experto en sonido Lee Dichter. La versión restaurada de «Moana con sonido» se proyectó en el Festival de Cine de Nueva York el 30 de septiembre de 2014 y también en National Archives en Washington DC (enero de 2015). El programa del Festival de Cine de Nueva York describe la versión restaurada como «absolutamente maravillosa»).

Moana is a 1926 American silent documentary film, or more strictly a work of docufiction, which was directed by Robert J. Flaherty, creator of Nanook of the North (1922).

Moana was filmed in Samoa (then under the Western Samoa Trust Territory) in the villages of Safune district on the island of Savai’i. The name of the lead male character, Moana, means ‘deep sea, deep water’ in the Samoan language. In making the film, Flaherty lived with his wife and collaborator Frances H. Flaherty and their three daughters in Samoa for more than a year. They arrived in Samoa in April 1923 and stayed until December 1924, with the film being completed in December 1925.

Hoping that Flaherty could repeat the success of Nanook, Paramount Pictures sent him to Samoa to capture the traditional life of the Polynesians on film. Flaherty reportedly arrived with 16 tons of filmmaking equipment. This included both a regular movie camera and a Prizma color camera, as Flaherty hoped to film some footage in that color process, but the Prizmacolor camera malfunctioned.

Moana is thought to be the first feature film made with panchromatic black-and-white film rather than the orthochromatic film commonly used at the time in Hollywood feature films. Flaherty developed his film as he went along, in a cave on Savai’i. In the process, he inadvertently poisoned himself and required treatment after he drank water from the cave that contained silver nitrate, which washed off the film stock. The silver nitrate also caused spots to form on the negative.

As in the earlier Nanook (and his later film, Man of Aran), Flaherty went well beyond recording the life of the people of Samoa as it happened. He followed his usual procedure of «casting» locals whom he considered potentially photogenic performers into «roles», including creating fictitious family relationships.

He also, as in the other films, on occasion set up scenes in which exotic earlier practices were re-enacted as if still current. In Nanook and Man of Aran, it included setting up anachronistic hunting sequences. In Moana, at a time when Samoans were typically wearing modern Western-style clothing under the influence of Christian missionaries, Flaherty persuaded his performers to don traditional tapa cloth costumes (made from the bark of the paper mulberry tree, in a process shown in some detail in the film); the «maidens» went topless.

He also staged a coming-into-manhood ritual in which the young male lead underwent a painful traditional Samoan tattoo, for which the young man required to be generously compensated. Those devices have led to Flaherty’s films sometimes being categorized as «docufiction».

Still, it emerged that living off the land and the ocean in Samoa was comparatively easy, leaving limited scope for Flaherty to draw on his favored theme of «Man against Nature» as he had in Nanook and was to again in Man of Aran. Thus, although the film was visually stunning and drew critical praise at the time, it lacked the raw drama of Nanook, which may have contributed to its failure at the box office. (Bruce Posner, the film’s restorer, commented: «God knows what Paramount expected. It was just poorly released. They tried to shift it into a love story of the South Seas, which it is, but not a conventional one.»)

The word documentary was first applied in a cinematic context in a review of this movie written by «The Moviegoer», a pen name for John Grierson, in the New York Sun on February 8, 1926.

Restoration

The youngest of the children Robert and Frances Flaherty brought with them to Samoa was their then-three-year-old daughter Monica. In 1975, Monica Flaherty returned to Savai’i to create a soundtrack for her parents’ hitherto-silent film, including recording ambient sounds of village life, dubbed Samoan dialogue and traditional singing. The resulting «Moana with Sound» was completed in 1980, with help from filmmakers Jean Renoir and Richard Leacock, and first shown publicly in Paris in 1981. At that stage, however, with the original negative no longer in existence, the visual quality of Monica Flaherty’s 16 mm print (a copy of a copy of her father’s original 35 mm nitrate film) left much to be desired, and it was to suffer further degradation with time. More recently, however, preservationist and curator Bruce Posner and Finnish filmmaker Sami van Ingen, a great-grandson of the Flahertys, drew on the best surviving 35 mm copies of the film to prepare, with the assistance of restorer Thomas Bakels, a digitally restored print, which was matched by sound expert Lee Dichter to Monica Flaherty’s soundtrack. The restored «Moana with Sound» was shown at the New York Film Festival on September 30, 2014, and has also appeared, among other showings, at the National Archives in Washington DC (January 2015). The program for the New York Film Festival describes the restored version as «absolutely wondrous».


Traducción de textos: Javier Oliva